La actividad estará a cargo de los arqueólogos Virginia Pineau y Carlos Landa, de la Universidad de Buenos Aires, quienes realizarán un sencillo experimento en el marco de la investigación que están desarrollando en el sitio Mariano Miró del norte provincial.

Se trata de un experimento de "arqueología histórica", una rama de la arqueología que se encarga de estudiar aspectos del pasado humano pero de tiempos recientes, es decir, de tiempos "históricos" y no "prehistóricos". La arqueología histórica suele trabajar con materiales que son de época post-contacto entre sociedades originarias y europeas (como loza, vidrio, metales, etc.) y en nuestra provincia reconstruye hechos que sucedieron entre el siglo XVII y principios del siglo XX.

Mariano Miró

El sitio arqueológico Mariano Miró se trata de un caso excepcional para la arqueología. Es un pueblo que estuvo habitado frente a la estación de ferrocarril homónima entre 1901 y 1914. A partir de entonces, el pueblo fue desarmado y el espacio que ocupaba fue utilizado para diversas tareas agrícolas.

En el año 2011 el equipo de arqueología fue convocado dado que se observaban en superficie gran cantidad de materiales de diversas materias primas: vidrio, gres, metal, loza y huesos.

Hasta el momento se han realizado 6 campañas arqueológicas y los resultados de estas investigaciones han sido presentadas en múltiples congresos nacionales e internacionales así como también en publicaciones científicas.

Fogón experimental

El objetivo general de este fogón experimental es replicar las características de los fogones excavados en el sitio Mariano Miró que fueron utilizados para el descarte de la basura del pueblo. Se trataría de dos tipos de pozos de descarte que podrían responder a dos formas distintas de gestión de basura en un asentamiento (urbano-rural).

La hipótesis que se sostiene es que los habitantes de Mariano Miró tuvieron dos formas distintas -probablemente complementarias- de gestionar la basura que generaban. Existieron basureros de índole doméstico, en donde era necesario reducir la basura con fuego por cuestiones sanitarias. También existieron basureros comunitarios en las afueras del pueblo, en donde no resultaba necesario realizar prácticas de reducción de la basura. Los carbones vegetales allí presentes podrían dar cuenta del vaciado en estos basureros de los residuos producidos en los basureros domésticos.

A partir de lo expuesto, los arqueólogos realizarán un fogón experimental en donde replicarán lo observado en el registro arqueológico para poder determinar las alteraciones que el fuego directo y el calor le hacen a los materiales. Con esta información se puede analizar los objetos arqueológicos y así poder comprender a qué procesos fueron sometidos en su descarte.

La actividad es organizada por la Dirección Provincial de Patrimonio Cultural de la Secretaría de Cultura y la Dirección de Cultura de la Municipalidad de Toay.